Las bermudas no pasan de moda. Tampoco este verano, en el que es tendencia todo lo que pueda ser o parecer artesanal, como los bolsos de mimbre. A ellos se suman, irremediablemente, los vestidos, una prenda ideal para combatir las altas temperaturas de la época estival y, además, hacerlo con estilo.
Después de los meses de confinamiento por la pandemia de coronavirus, hay más ganas que nunca de lucir vestidos, ya sean largos, cortos o midi. Hay ganas de color, de flores, de volantes, y de estampados, para conjuntar con sandalias planas, de cuña o con alpargatas.